domingo, 14 de agosto de 2011

Thèramon. El Origen (I). De la creación de los mundos y el nacimiento de los heryshi


Creo que ha llegado la hora de hablar del génesis de Thèramon. De los orígenes, de la historia de la creación. No de cómo nació la idea, sino de cómo se originó el mundo. ¿Por qué? Os lo explico. 
Ayer, mi querida Jules me dejó un comentario en mi muro de facebook:

               Ah, y 1 sugerencia: podrías poner una sinopsis/resumen de la saga Thèramon en blog??? Hoy alguien me han preguntado de qué iba, y no he sabido decirle muy bien.

Bien, hay dos cosas para las que soy una completa negada: hablar en público, y resumir. Dos grandes inconvenientes, puesto que aspiro a ver mi obra publicada, y no me imagino en la presentación de la misma, hablando delante de un puñado (tampoco imagino un grupo, y mucho menos una multitud) de desconocidos y tratando de explicar de qué trata mi novela. 
Siempre digo que Thèramon ha de hablar por sí mismo.  Podéis pensar que es una excusa, que soy demasiado vaga para hacer una sinopsis, o peor aún, que ni yo misma sé de qué va la cosa, que me limito a escribir sin saber qué es lo que quiero contar. Podéis pensar lo que queráis. Yo pienso que la inmensidad de Thèramon no puede resumirse en un par de frases, que su complejidad es demasiada como para intentar explicarla en dos líneas. Hay gente que sirve para eso, yo no, no sé hacer una sinopsis; cuando hablo del último libro que he leído y me preguntan: ¿de qué va?, yo acabo contando el libro entero, no sé resumir.

Existen muchas Historias de Thèramon, y cada una es una aventura independiente, aunque todas están relacionadas entre sí a pesar de que transcurren en diferentes Eras; cada una de estas historias es un viaje en busca del autodescubrimiento, el camino que el héroe ha de recorrer para alcanzar el destino que los dioses le tienen reservado; siempre hay dudas, temor al fracaso, amistad, amor, pérdida, lucha; siempre hay dragones, y la presencia del unicornio al que se ha de proteger a toda costa, porque el unicornio es el pilar básico de Thèramon, y si él desaparece Thèramon también lo hará. ¿Qué más puedo deciros? Es una historia fantástica, no he inventado la sopa de ajo. No hay elfos, ni orcos, creo que ni siquiera hay enanos en Thèramon, pero tiene los ingredientes necesarios en toda historia fantástica. ¿De qué trata? ¿De la eterna lucha entre el Bien y el Mal? Podéis quedaros con eso, aunque tampoco es el cúlmen de la originalidad, ¿no tratan todas las historias de esa eterna lucha, en mayor o menor medida?

Lo que sí puedo hacer es mostraros Thèramon lo mejor que sepa, y dejar que mi mundo y mi prosa hablen para todos vosotros. Llevo varias semanas trabajando en la historia de la creación de Thèramon, no sabía cómo contarla. ¿Me limito a decir lo que sé de los orígenes de mi mundo, según me venga a la cabeza, como en una exposición oral? ¿O mejor lo explico con un relato, se entenderá mejor, es lo que los compañeros esperan?

Al final me he decidido por la segunda opción. Escribir siempre se me ha dado mejor que hablar.
He tenido que buscar entre mis viejos escritos, reunirlos y darles forma, los he dividido en varios relatos, he tenido que corregir y que pulir, perdonad que haya tardado, espero que haya merecido la pena la espera. A mí me gusta el resultado. Ya me diréis qué os parece a vosotros.

Debo recordaros que todos los textos que aparecen en este blog están registrados, disfrutad de ellos, y respetadlos, os lo ruego.
Y para aquéllos que vean un exceso de la conjunción Y (que te veo venir, Raquel), recordaros que esta narración en particular bebió especialmente de "El Silmarillón", del gran maestro Tolkien, así que no seáis muy duros con vuestras críticas; el relato pedía este ritmo, esta musicalidad.



© Bea Magaña. (Reservados todos los derechos)  

DE LA CREACIÓN DE LOS MUNDOS Y EL NACIMIENTO DE LOS HERYSHI


"En el principio era el Vacío, y en la inmensidad de la nada infinita existía una Conciencia que soñaba sueños de creación. En su vientre se gestaba una miríada de mundos, y en su mente buscaba un nombre con el que describir a cada uno de ellos. Porque nada puede existir sin un nombre que lo identifique y lo distinga del Vacío. Ella lo sabía bien; no había sido consciente de su propia existencia hasta que su propio nombre fue creado, y el Vacío lo conoció y la reconoció como una entidad independiente de él. Aunque nadie había pronunciado nunca su nombre, porque no había nadie que pudiera hacerlo. Y su soledad y la necesidad de escuchar el sonido de su propio nombre la llevaban a desear que existiera algo más.
         Pero estaba sola, y no sabía cómo llevar a cabo sus sueños. Estaba sola, y no podía pedirle ayuda a nadie. Su deseo era grande, también su desconocimiento. El Vacío estaba ahí, esperando a ser llenado, pero no ayudaba ni daba consejos. Imaginaba la existencia de otros como ella, los buscó en el Vacío, no los encontró. Tardó en comprender que, si existían, no podía llamarlos, porque no conocía sus nombres. Trató de imaginárselos, acabó por inventárselos, no se atrevió a pronunciarlos en voz alta. Se animó a susurrar el suyo, a modo de presentación, esperó una respuesta, el Vacío guardó silencio. Se convenció de que estaba sola, lloró, pronunció su propio nombre en voz alta, se lo repitió muchas veces, para convencerse de que era real.
     Cuando aceptó que lo era, y que nadie sino ella podría hacer realidad sus sueños, descubrió su propio poder. Comprendió el significado de su nombre. Y dio a luz a su creación.
        Entonces, los mundos que se habían estado gestando en su vientre llenaron el Vacío, y eran tan reales como ella misma, y estaban vivos. Y ella volvió a pronunciar su nombre en voz alta, para que todos los mundos pudieran reconocerla. Tiere, la que dio a luz al universo, así se presentó ante ellos. Y todos los mundos repitieron su nombre, extasiados, y la llamaron diosa, y la llamaron madre. Y la amaron. Y el amor que Tiere sentía por todos ellos, sus hijos, la impulsó a seguir creando. Pues eran muchos los sueños que deseaba hacer realidad.
       El poder está en la Palabra, y por medio de ella su pensamiento cobró vida. De su pensamiento hizo a los heryshi, los Sagrados, sus iguales, sus vástagos; sólo tuvo que pronunciar en voz alta los nombres que había imaginado para ellos, y aquéllos con los que había soñado aparecieron junto a ella en respuesta a su llamada. Y los heryshi la adoraron, y le agradecieron que les hubiera rescatado del Vacío, y la llenaron de alabanzas. Y se interesaron por su creación, y quisieron ayudarla. Entonces Tiere les mostró sus sueños, y compartió con ellos su poder, y les enseñó a utilizar ese poder para crear. Y los mundos se llenaron de vida.
        Uno por uno, Tiere fue recorriendo los mundos que habían nacido de sus sueños y les dio un nombre. Y en cada uno de ellos dejó su aliento, su inspiración, y todas sus bendiciones; y a uno o varios de los heryshi que la acompañaban y que quisieron quedarse, con la promesa de hacer crecer ese mundo del que se habían enamorado.
         Ahora bien, el universo es infinito, como lo fuera el Vacío en el principio de los tiempos, e incluso a día de hoy Tiere no ha terminado de recorrerlo entero. Por eso existen muchos mundos que no han recibido todavía su nombre, y que no han conocido a los heryshi, aunque están tan vivos como el resto de los mundos, y habitados por criaturas que Tiere llegó a imaginar en algún momento, pero que no llegó a ver con sus propios ojos. Y, al igual que una madre que tiene infinidad de hijos no puede vigilarlos a todos al mismo tiempo, así ocurrió con estos mundos y con las criaturas que de ellos surgieron, desconocedoras de sus orígenes; que crecieron libres y salvajes, y se hicieron a sí mismas, y no responden ante ningún Creador, y sólo a sus propios intereses guardan lealtad.
      Porque eso es lo maravilloso y al mismo tiempo lo aterrador de los sueños: que, una vez encontrado el poder para hacerlos realidad, ni el más grande de los dioses es capaz de detener el proceso de la creación, y todo lo que en su momento se imaginó cobra vida, y crece sin supervisión, y adquiere conciencia de sí mismo. Y, cuando esto ocurre, ni siquiera el Creador de todos los mundos es capaz de controlar el camino que su creación va a seguir."



Si os ha gustado, colgaré el resto, prometido. Si no os ha resuelto ninguna duda, sois libres de decírmelo. Naturalmente, si no os ha gustado, también deseo saberlo. Agradezco todos vuestros comentarios, ya sabéis que cada vez que dejáis huella de vuestro paso por Thèramon, Thèramon crece.
Que los dioses os guarden.

19 comentarios:

  1. Bea, mi querídisima Bea...lo primero que quiero decirte es que no te preocupes por el resumen, llegará un momento en que saldrá solo, sin apenas esfuerzo, porque es así. Hacer el primer resumen de Eterna Oscuridad me llevó casi dos meses y no me gustaba ni un pelo hasta que, de repente, un día me vino a la cabeza el resumen perfecto y...voilà! Así que no te preocupes, ya saldrá :P
    Ahora tengo que hablarte de la creación...me ha encantado, me ha puesto los pelos de punta la soledad de la pobre Tiere: "Se convenció de que estaba sola, lloró, pronunció su propio nombre en voz alta, se lo repitió muchas veces, para convencerse de que era real." Simplemente una descripción preciosa que, a lo mejor le estoy sacando punta, pero me hace pensar en la labor del escritor, esa tremenda soledad en la que a veces nos sentimos sumidos y que no hace más que levantar dudas sobre lo que hacemos o no hacemos...En fin, que me ha encantado esa parte, como ya imaginarás :P
    Aparte de esa delicadeza y musicalidad que hay en el relato (te voy a dar la razón con el uso de la conjunción, el relato lo pide), me ha gustado el sabor épico que salpica cada una de las descripciones. No sé si habrás leído la historia de la creación que hace Hesíodo en "Los Trabajos y los Días", pero tu relato me ha recordado mucho esa narración en concreto que siempre me ha parecido espectacular.
    Para terminar, aunque supongo que ya lo habrás deducido por el comentario, te voy a decir que, como siempre, has logrado sorprenderme con esa manera de escribir tuya...tan clásica, tan poética y tan innovadora al mismo tiempo.
    Un beso, mi niña, y espero leer más sobre este mundo tan maravilloso al que nos has acercado.

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  2. Hola Bea... por estos lares de nuevo, visitando Thèramon, despues de mucho tiempo de ausencia. No he olvidado tu historia, ni a tí. No hay excusa, lo se. Te reitero mi admiración ante la majestad de tu prosa, me parece magnífica!!! En cuanto a la creación que describes, es tan magna como tu prosa. Coincido con el comentario anterior, cuando equipara a Tiere con un escritor; sí, un escritor ya nunca mas estará sólo, pues siempre lo acompañaran sus creaciones. Además, el último párrafo me resulta impactante. Es una forma diferente, a mi parecer, de decir que somos libres de la voluntad de un creador, que la libertad no es un don dado por algo o por alguien, sino que es producto de la vitalidad misma de la creación...

    Te dejo un abrazo...

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  3. Mi querida Enone, como era de esperar has localizado la frase clave, y la has comprendido perfectamente. Ésa es la soledad que he sentido siempre, la que me ha empujado a escribir desde que era niña,la necesidad de crear, de sentirme viva. De amar. Porque el amor es la fuente de toda creación, y la capacidad de amar es la mejor demostración de que existimos, de que somos reales.
    Gracias por dejar tu opinión y tu cariño, la primera me ayuda a mejorar, el segundo me alegra el corazón.
    Océanos de amor, mi niña!

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  4. Juanra, gracias por tu visita, y por tus palabras. No te disculpes, las puertas de Thèramon están siempre abiertas, no tienes más obligación que la de tu necesidad, tu curiosidad y tu voluntad. Ven cuando puedas, ven cuando lo desees. Ni Thèramon ni yo te olvidamos, compañero de viaje.
    Recibo tu abrazo, y te dejo el mío de vuelta.
    Que los dioses te guíen... y que tu libertad te conduzca por el buen camino, aquél que te haga feliz 8)

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  5. Tu como siempre, con palabras desbordantes de cariño... como quisiera conocerte en persona, y darte un abrazo...

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  6. Muy filosófico, Bea, me ha gustado mucho. Tienes razón: si se resumen, las epopeyas quedan reducidas a cuentecitos para niños. Y Thèramon requiere su tiempo, como un lenguaje que hay que aprender para transportarse a otro mundo. Me parece perfecto.

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  7. Bea la pregunta de si nos ha gustado sobra a estas alturas jajajajaja. Así que ya estás tardando en poner "origen de Theramon 2" ok? jajaja me hizo mucha gracia que me mencionaras en la entrada, ¿tan criticona soy? xdd Bueno cuando te dije lo de la conjunción era pensando en que quizás no te dabas cuenta de que abusabas (muchas veces a los escritores nos pasa, ya lo sabes) Pero con el tiempo me he dado cuenta que forma parte de tu manera de contar la historia (con esa prosa elegante y con cierto matiz clásico), por lo que retiro el comentario de la conjunción jajajaj. Al margen de esta puntualizazión tengo que decir que como siempre me ha encantado y nunca dejas de sorprendernos dado que nos sigues mostrando más y más mundos e historias de Theramon. Por cierto, leía esta entrada y pensaba que es así como te sentiste la primera vez que Theramon iluminó tu mente. Mil besotes!!!

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  8. Mis más sinceras felicitaciones, Bea; una vez más. Da un gusto terrible leer Thèramon, con ese estilo tan tuyo, tan inconfundible. No lo cambies, pues es uno de tus mayores encantos (y tienes muchos más).

    Me ha gustado mucho esa "Teogonía" de Thèramon y el inicio de ese maravilloso mundo. Con trocitos así es mucho más fácil de comprender y amar ese mágico mundo. Ese despertar de la consciencia (con s o sin s??? jejeje) y el nacimiento de los mundos, como los hijos de una madre, nace fruto de una sensibilidad y un gusto totalente thèramónicos (le pongo dos acentos, no sé porque).

    Muchas gracias por colgarlo para todos, ahora esperamos impacientes la segunda parte y la tercera, y la cuarta....

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  9. Y seguís aquí, dejando vuestros comentarios, animándome, haciéndome sonreir y queriéndome. ¿Cómo puedo seguir teniendo ataques de tristeza, si soy una persona tan afortunada? Me quedo sin palabras de agradecimiento. Cada nuevo pedazo de Thèramon es mi forma de daros las gracias.

    Magnus, querido amigo, cada visita tuya es un honor para mí. Sabes que lo que más admiro de tu prosa es tu capacidad para decir tanto en pocas palabras, algo que me gustaría llegar a aprender. Siempre me enseñas algo nuevo,y siempre me inspiras. Te digo gracias.

    Reicaal, mi querida karendin, tu entusiasmo y tu risa son motivo de alegría, siempre. Claro que te mencioné, sabía que ibas a ser la primera en contar las veces que aparecía la Y en este texto. Por supuesto que me doy cuenta de lo que hago cuando escribo, cuando abuso de ciertas expresiones, cuando me repito... lo hago a propósito, y siempre con una finalidad. Cada relato requiere un tono y un ritmo, y procuro dárselo. Pero tengo en cuenta todas las críticas (u opiniones,si prefieres). Aunque ya sabes que mis Musas hacen lo que les da la gana... y me alegro de que lo hagan!!

    Mi Jordi querido, leal compañero de viaje y apoyo constante, me hace muy feliz que te haya gustado la primera parte del génesis de Thèramon. Ya estoy retocando y puliendo la segunda parte, y habrá más, una tercera, puede que una cuarta... ya sabes que hay mucho escrito, mucho de donde seleccionar.
    Según mi diccionario, consciencia = conocimiento que el espíritu humano tiene de su propia existencia, de sus estados, de sus actos y de las cosas. Y consciencia = conciencia. Así que pongamos fin a nuestra eterna discusión; seguiré escribiendo "tener conciencia de" y "ser consciente de", puesto que ambas expresiones son correctas (¿mi argumento me otorga tu reconocimiento (jeje)?)
    Yo tampoco sé por qué, pero creo que thèramónico lleva los dos acentos. El tiempo nos dará la razón.
    Gracias por seguir ahí, mi querido tifinag.

    Gracias a todos por formar parte de mi mundo. Os debo mucho más que una historia. Hacéis que me sienta feliz de estar viva.

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  10. Hola!!
    Permiteme presentarme soy Melannie, administradora de un directorio de blogs, visité tu sitio http://dedragonesyunicornios.blogspot.com/ y está genial, me encantaría poner un link de tu blog en mi sitio web y por mi parte te pediría un enlace hacia mi web y asi beneficiar ambas webs con más visitas.
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    Éxitos con tu blog.
    Un Saludo
    Melannie.

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  11. Creo que lo conseguí al fin, o sea: poder dejar un comentario en esta FABULOSA entrada. Creedme que ayer me cabreé de veras con blogger; mis comentarios nacen de mi corazón y ninguno es igual al anterior. Así que a ver cómo lo expreso hoy. Antes que nada, gracias por tener en consideración mi sugerencia sobre la sinopsis... ahora ya puedo decirle a Raquel, mi sobrina, que si quiere saber de Thèramon, esta entrada es lo más parecido a un resumen que has hecho, jajaja. En segundo lugar: es mucho mejor que cualquier resumen convencional; me sorprendes, y me encanta que me sorprendan en un mundo y un siglo que no consiguen arrancarme una sonrisa de sorpresa ni a la de tres. También le comenté a Raquel: lo que más me gusta de Historias de Thèramon es que no tengo ni repajolera idea de cómo va a acabar la historia. Y eso es sensacional porque llevo ya demasiado tiempo leyendo novelas cuyo final conozco antes de haber empezado a leer. Pero contigo tengo la intriga, el gusanillo, la refrescante sensación de que me vas a dejar patidifusa. Me gusta cómo has expresado y descrito ese fantástico origen... me cuesta mucho leerte en el blog; cuento los días que faltan para ver Thèramon en mi habitación, en papel, tapa dura, y en el lugar de honor que le corresponde (diría que esto ya lo dije en otra ocasión). Sólo te pido una cosa: sigue inspirándonos, sigue inspirándome. Saca provecho de la tristeza tanto como de los momentos de éxtasis y felicidad. Y no olvides que somos una legión de fans clamando por el maná en el desierto. Te sigo. Te quiero. Besos.

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  12. hay prima, mi oceano de amor, como siempre yo tan breve, solo decirte en letras muy mayusculas, que si te tubiese al lado del grito te dejaría más que sorda

    QUIERO MÁAAAAAAAAAAAAAASSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

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  13. Al principio una historia, siempre se asemeja a un puzzle recién sacado de la caja, piezas desperdigadas, pero que cobran forma cuando las vas uniendo. Eso ocurre con Théramon y sus historias, independientes y a la vez una sola.
    Me alegro de que no sepas resumir, porque entonces me estaría perdiendo todos esos matices y aclaraciones que ayudan a entender cada vez más tu mundo.
    La fantasía no se reduce a orcos, elfos y otras criaturas. Un mundo mágico en el que sólo tienen cabida los hombres y los dioses, es igual de atractivo.
    En cuanto a la cadencia de la narración, el uso de conjunciones, a mi me encanta, la dota de eso carácter épico propio de esta literatura. Cierto que Tolkien usaba mucho este tipo de narración, pero ese es el encanto de sus libros, en particular el que nombras. Leerlo de otra forma sería imposible, sin que perdiera su punto.
    Un besazo, Bea!!

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  14. Hola Bea: acabo de llegar a tu mundoy me ha gustado lo que he leido. Desde luego que hay historias que no se pueden resumir y que llegaran al lector por su propia fuerza.!Te felicito!y te deseo la mayor suerte del mundo.

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  15. comentario rescatado del muro:

    Daniel Estorach Martín- Bea es una escritora del copón. Os la recomiendo a los amantes de Tolkien en concreto y a los amantes de las historias de fantasía en general.

    La verdad es que, con lectores tan entusiastas, escribir se convierte en un placer doble. Pues ya no escribo sólo para saber qué va a pasar a continuación, o cómo va a terminar cada historia (yo tampoco tengo ni idea, Jules); escribir es una necesidad para mí, lo disfruto, me hace sentir viva. Pero poder compartir lo que escribo... uf! eso es, sin duda, lo mejor de todo.
    María, totalmente de acuerdo contigo. La magia no está en los seres que pueblan un mundo, sino en las historias que protagonizan, y sobre todo en el mundo en sí. En Thèramon no hay elfos ni orcos, pero hay mucho más que hombres y dioses, y llegaremos a descubrir a todas sus criaturas. No sé si la historia será del agrado de los lectores, no sé si cumplirá las expectativas, ojalá no decepcione a nadie; pero lo importante es que cada uno de vosotros disfrute del viaje, qué más da a dónde nos lleve. Yo lo estoy disfrutando enormemente.
    Jules, espero seguir sorprendiéndote. Creo que decir legión de fans es exagerado, pero deseo que algún día sea cierto, y que la legión de fans de Thèramon no se sienta nunca decepcionada.
    Susi, gracias por todo lo que haces, por tu entusiasmo, por tu ayuda inestimable.
    Antonio, bienvenido a Thèramon. Ya eras compañero de viaje desde el principio, me alegra que te hayas decidido a dejar huella de tu paso. Ojalá te guste tanto que decidas quedarte.
    Daniel, dijiste eso de mí delante de mucha gente, y mi forma de darte las gracias es poner aquí tu comentario; cuando tengas tiempo, deja tu opinión por ti mismo. Sin prisas, compañero, cuando puedas, cuando quieras.

    Gracias a todos!

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  16. Hola, hacia muchos dias que no podia pasar por el blog y la verdad es que esta entrada me ha encantado, es genial, tengo muchisimas ganas de seguir leyendo sobre Theramon, ya que me encanta la historia te engancha hasta la medula, pero este origen es genial, me encanta... Muchas felicidades, y sigue así tengo muchas ganas de seguir leyendo... Y gracias por compartirlo.

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  17. Querida Ana, gracias por tu visita y por tus palabras, me animas a seguir escribiendo, aunque estos días las Musas están de vacaciones, problemillas personales que me mantienen ocupada con otros pensamientos. No escribo, pero sigo trabajando (así funciona mi cerebro hiperactivo) en el génesis de Thèramon, buscando la inspiración necesaria para confeccionar una continuación a la altura de la primera parte. Gracias por tu paciencia, y por tu cariño constante. Y perdona mis ausencias, no estaré siempre desaparecida, te lo prometo.

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  18. Bea, yo también tengo una cosmogonía en mi blog, también Dios nace en el vacío y durante una inmensidad de tiempo no es más que un trozo de nada que piensa, llega un momento en que sale de su ensimismamiento y observa fascinado la inmensidad de espacio vacío y siente el deseo de expansionarse en ese espacio pero duda de si no será todo una de sus ensoñaciones o pensamientos. Para cerciorarse de que la realidad existe fuera de él busca a un no-yo y lo encuentra pero desea su destrucción. Cuando comprende que en el enorme espacio vacío sólo están él y ese ser que le odia, abate su rostro y con profunda amargura y desesperación, resopla hacia abajo y de ese aire que sale de su boca nace en ese momento todo nuestro Universo. No me sentía más amado que como muestro es esta historia cuando la escribí. Como ves, no todo son alegrías en La Casa Agramatical. Pero más que por que aquí hables de la cosmogonía, te lo he contado porque... así es como me siento ahora. Discúlpame por utilizarte de psicoanalista pero cada día que pasa estoy más triste. Sólo en éste blog me atrevo a escribir estas cosas, quizá tampoco debería.

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  19. La palabra gustarme se queda corta :) Me ha encantado, aunque lamento decirte qeu si hubieras nacido en el Renacimiento, la Inquisición hubiera quemado tus libros, o lo que es peor, te hubieran obligado a quemarlos tú misma, como le ocurrió a Pedro Abelardo. Acabas de poner en palabras lo que muchas veces, siendo creyente, he pensado... como escritora, a veces tengo tantas cosas en la cabeza que mis propios personajes toman su propio rumbo, tal y como le ha pasado a Tiere con sus creaciones y ya no son ellos los que obedecen a tu pluma, sino tu pluma la que está al servicio de sus caprichos y decisiones. Interesante planteamiento. Precioso capítulo. :)

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Viajeros de tierras lejanas, amigos de siempre, vuestra visita nos alegra y vuestra opinión nos ayuda, recordad que cada vez que dejáis huella de vuestro paso, Thèramon crece.

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Por Susana © Registrado por Bea Magaña

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