martes, 27 de diciembre de 2011

Haciendo balance (como casi todo el mundo)

Falta muy poco para que acabe el año, y no soy la única que está haciendo balance: cosas buenas, cosas malas, sueños cumplidos, éxitos, qué hemos aprendido, qué hemos encontrado a lo largo del camino, qué hemos tenido que dejar atrás, qué esperamos del futuro... No voy a hacer una lista, no deseo aburriros. Sólo deciros que 2011 ha sido el mejor año de toda mi vida.

Mi cumpleaños es el día 31. Nací el último día del año, justo una hora antes de que sonaran las campanadas, siempre he sido la última para todo. Dicen que lo bueno siempre se hace esperar, a veces ese pensamiento me consuela. Dicen que la última noche del año es una noche mágica, a veces eso me hace sentir especial. Pero la mayor parte del tiempo, más que especial, me siento diferente. No soy como las personas que me rodean. No me gusta salir, no veo la tele, no me van los cotilleos, no hablo demasiado, apenas tengo amigos. Vivo sola con mi gato, rodeada de libros y de sueños, pegada al ordenador. Mis amigos están todos al otro lado de la pantalla, y a la mayoría de ellos jamás les he visto, pero son más reales que las personas con las que convivo a diario. Y los quiero con todo mi corazón. Tengo una relación de pareja con un hombre maravilloso al que no puedo abrazar y al que no deseo perder. Y escribo sobre criaturas que las personas que pueblan el mundo “real” juran que no existen. Siento que no pertenezco a ese mundo, que ese mundo no es más real que el que yo misma he creado. Me llaman friki. Me llaman rara. Me llaman cría. Me llaman ilusa.
Me hacen sentir sola.

Pero pertenezco a Thèramon, y Thèramon es un mundo real, no sólo para mí. A lo largo de este año, Thèramon ha conseguido llegar a los corazones de muchas personas, vosotros, queridos compañeros de viaje. Vuestro apoyo, vuestro interés, vuestros comentarios, han hecho que Thèramon dejara de ser el fruto de mi imaginación y el lugar en el que viven mis sueños, lo han convertido en un mundo real y vivo, lo han hecho crecer.
No me siento sola. No estoy sola en este viaje. Y creo, más que nunca, que todos los sueños se cumplen, cuando les llega el momento.
El momento es ahora. El momento comenzó en abril de este año, cuando me decidí a crear este blog. Nunca he recibido mejor consejo, nunca he tenido mejor idea que seguir ese consejo y mostrar Thèramon al mundo. Gracias a este blog os he conocido, muchos de vosotros sois ahora mis queridos Ilohiim, los Elegidos de mi corazón. A vuestro lado me siento comprendida y arropada, y acompañada, y querida. Este año ha sido el más feliz de mi vida. Y deseo que dure, que 2012 me siga bendiciendo con vuestra amistad y vuestro cariño, que se cumplan vuestros sueños y los míos, que sigamos compartiendo nuestra felicidad, que no se pierda el amor, que es la fuente de toda creación, porque gracias al amor que siento y al amor que recibo sigo escribiendo. Y cuando escribo sí que me siento especial. Cada vez que uno de vosotros me dice “quiero más Thèramon” me siento especial. Espero no llegar a decepcionaros nunca.

El capítulo que os traigo hoy no es el más interesante de esta Historia de Thèramon que estoy compartiendo con vosotros. No soy muy buena describiendo la geografía, perdonadme si este relato no está a la altura de los anteriores. Pero debéis leerlo, si queréis seguir el capítulo, nos explica más cosas sobre las mujeres guerreras, y os ayudará a comprender cómo Dayna llegó a sentir amor por ese ladrón que a muchos no os resulta nada atractivo. El encuentro de ambos os lo dejaré dentro de unos pocos días, mi propósito es acabar el año con ese relato, que espero responda a algunas de vuestras preguntas. Y el año que viene... bueno, dependerá de vosotros, si queréis seguir leyendo seguiré colgando capítulos de esta historia. Espero seguir colgando capítulos de esa historia.
Y que las Musas me den muchos capítulos nuevos de las otras Historias de Thèramon que deseo seguir compartiendo con todos vosotros.

Me he extendido mucho, lo sé, lo he hecho porque el relato de hoy es corto, y el próximo no lo será tanto, y deseaba deciros lo importantes que sois para mí, lo mucho que os quiero y que os necesito en mi vida, y lo mucho que Thèramon os debe a todos.
El día 31 no seré tan plasta.
El 31 os diré Suerte!! Hoy os digo GRACIAS.

                      ******

© Bea Magaña (Reservados todos los derechos)

El camino antes recorrido (II)

"El Daro Arborae había aparecido de repente, después de la batalla de los Campos de Wüstenor, una espesa barrera que separaba Drinveld Meara de Sàaräni-Erye. Era un lugar oscuro y fresco que las Mazome frecuentaron al principio, llenas de curiosidad, acaso esperando encontrar en su interior a sus hombres desaparecidos. Crecían en él extrañas flores azules que se mostraban hostiles cuando alguien se les acercaba. A excepción de lo que sucedería en un bosque frondoso, en éste no moraban animalillos, ni anidaban aves en los árboles de madera negra y lisa. La hierba era oscura y rala, el suelo húmedo recordaba la anterior existencia del río, y no se veía el cielo azul cuando se estaba allí adentro.
    Al oeste, el bosque se interrumpía de forma abrupta. Cientos de metros más abajo, el Mesagua corría encerrado entre las paredes de un inmenso desfiladero que llamaron Cañón de la Media Luna debido a su forma de hoz. No existían pasarelas o puentes que comunicaran el bosque con el desierto. Al sur, el río se precipitaba en los Abismos del Silencio. Al norte, los árboles empezaban a escasear a la altura del camino que unía el Desierto de las Ilusiones con la frontera de Samura Dalnu; un puente natural de roca permitía atravesar el río y después la tierra volvía a ser llana y pedregosa.
    Las Drin Mazome se dedicaron a buscar nuevos hombres en las ciudades pobladas del este. Nacieron nuevos niños y vieron renovarse su raza, lejos de la extinción. De la noche a la mañana, aparecieron los Elfos Oscuros, que se apropiaron del Daro Arborae y se dedicaron a robar a los bebés. Las guerreras solitarias pensaron que sus hombres habían regresado, convertidos en horripilantes criaturas que las castigaban por su olvido. No volvió a haber hombres libres en el Mar de Hierba. Se constituyó una sociedad matriarcal, liderada por una mujer, la Tiara, se crearon nuevas Leyes, y las Drin Mazome se convirtieron en la hermandad de guerreras que eran actualmente.
    Si tomaba el camino del oeste, pero no se acercaba al Daro Arborae, seguramente no se encontraría con ningún Elfo Oscuro. No necesitaba cruzar el río en aquel lugar. Ya lo atravesaría más adelante. No recordaba haber dudado tanto en el pasado.
    El Mesagua nacía en algún lugar al este de Boreade Saaru, en la cara de las montañas que miraba hacia Minroq Dalnu. Lo llamaban el Río de la Sal, porque la proximidad del desierto volvía sus aguas saladas al poco de su nacimiento, pero no se internaba en Sàaräni-Erye en ningún momento. Su curso caudaloso servía de barrera entre Samura Dalnu y el País de las Torres, pero no se unía al Mörtem Mearae hacia el este, sino que se desviaba, dibujando meandros, hacia el sur, y su curso sinuoso hacía pensar que el río no sabía hacia dónde dirigirse para morir. Hacia la mitad de su recorrido se encaminaba hacia el oeste, y conformaba una frontera vadeable entre Sàaräni-Erye y el País de las Sombras, y desde allí continuaba en línea recta hacia el sur, desviándose por última vez antes de volver al oeste encerrado entre las altas paredes del Cañón de la Media Luna, donde era infranqueable. Cuando la garganta moría desviando su curso hacia el este, el bosque a su derecha descendía a encontrarse con las aguas y el Río de la Sal corría libremente por el Daro Arborae, en algún punto del cual moría.
   Las Drin Mazome no se habían aventurado por el Bosque Negro desde hacía decenios. En otro tiempo, cuando las mujeres guerreras habían sido más numerosas y sus enfrentamientos con los Elfos Oscuros habían estado a la orden del día, habían cruzado el Daro Arborae y habían luchado contra sus enemigos junto al barranco que ponía fin al bosque. Desde allí habían arrojado a cientos de Elfos Oscuros al fondo del Cañón de la Media Luna. Cientos de Elfos Oscuros habían perecido ahogados en el Mesagua. Ahora éstos eran una raza diezmada, igual que ellas, y procuraban evitar los enfrentamientos directos, prefiriendo atacar por sorpresa. Lo cual era bastante difícil de conseguir, pues las Drin Mazome vigilaban los caminos constantemente, y no se permitían bajar la guardia ni de día ni de noche.
    Existían tres caminos para acceder a Drinveld Meara. Tres caminos que los Elfos Oscuros podían tomar si decidían atacar a sus vecinas o aventurarse en busca de las criaturas que les servían de alimento. El más rápido y directo, así como el más desatinado, les llevaba en línea recta desde la zona más austral del Daro Arborae, a través de una explanada desnuda, y después cuesta arriba por terreno pedregoso y descubierto, donde eran blancos fáciles para las guerreras que estaban muy escarmentadas y ya no se dejaban sorprender por sus enemigos. El segundo camino, no tan directo, también rápido y tal vez el más arriesgado, les llevaba desde la parte norte del Daro Arborae hasta el Mirador, y de allí al sur, pero tampoco los Elfos Oscuros tenían éxito por este lugar, pues las Mazome se apostaban precisamente en esta loma, que era un punto de vigilancia estratégico desde el cual controlaban todos los senderos. Su tercera opción era la vía más larga, y tampoco ésta les aseguraba el éxito; podían abandonar el Daro Arborae por el norte, caminar durante una jornada hasta llegar al Paso de Sheim, atravesarlo en dirección este, bordear la Pradera y atacar entonces desde el límite oriental del Mar de Hierba. Desde el Paso de Sheim no podían alcanzar el Mirador, pues las paredes del despeñadero no les permitirían la escalada. Sin embargo, desde el Mirador sí se podía descender al fondo del barranco. Por ese motivo, los Elfos Oscuros llevaban tanto tiempo sin dar señales de vida. Las Drin Mazome tenían vigilados todos los caminos. No eran una presa fácil.
    Dayna era una mujer sola a lomos de una magnífica yegua, armada y alerta, tampoco era una presa fácil. Había dejado el Mirador atrás y muy arriba, y ahora observaba el camino que tenía por delante, detenida sobre su montura en el centro de la encrucijada. La yegua resoplaba, pero esperaba una orden de la amazona. La mujer había dado el paso más difícil, que era abandonar la seguridad de las alturas, pero ahora no parecía tener prisa por continuar su camino. El mundo se hallaba en silencio. No cantaban pájaros en el Daro Arborae; no se percibía movimiento alguno hacia el este. En el oeste, más allá de los árboles, más allá del precipicio, el desierto se extendía, amenazador. Hacia el norte de la encrucijada, el camino llevaba al Mörtem Mearae y a la playa de Buccane, que la mujer pretendía evitar. No quiso mirar hacia atrás.
   Suspiró, cerró los ojos, acarició el pescuezo de la yegua. El camino se extendía, se extendía... y lo que buscaba se encontraba muy lejos. Presentía que las Drin Mazome no disponían de mucho tiempo. Tenía que partir.
   Elevó una plegaria a sus dioses y fijó la mirada en el noroeste. Se recordó a sí misma que ya no era una niña, para infundirse valor, y siguió su camino, sin prisa, como si estuviera dando un paseo. Al otro lado del Mesagua existía un país nuevo. La yegua trotaba y Dayna vigilaba el bosque a su izquierda, pero nada se movía en su interior. Se apartó del camino y siguió el curso del río hacia el norte. No lo cruzó, pero supo cuándo dejó el país que conocía; no miró atrás cuando traspasó la frontera invisible de Samura Dalnu. Los soles se ocultaron y la mujer no se atrevió a espolear a su yegua. El viento que soplaba del desierto era cálido. Y Dayna cabalgaba con una mano sobre la empuñadura de su espada de doble hoja y los pensamientos centrados en el pasado."

10 comentarios:

  1. Hiciste bien en crear este blog, Bea, hiciste bien en escribir y haces bien en seguir escribiendo.
    Nos parecemos, tampoco yo salgo mucho ni disfruto con lo que disfruta la gente normal "Humanos..." suelo decir entre murmuraciones.
    Así que siéntete especial, Bea, porque siempre lo serás.
    A parte, que sepas que tengo un cariño especial por los elfos oscuros, y nunca he sabido por qué... xD.
    Un besazo enorme.

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  2. que reflexión tan bonita y que bien ser diferente.
    ¿porqué hay que ser como los demás?
    ¿quién dice que hay que ser de una manera y no de otra?
    ser raro casi siempre es ser especial. yo me considero rara, me considero diferente, me considero mía, yo y sólo yo, soy lo que soy, le guste a quién le guste y le pese a quién le pese.
    a los amigos los vas encontrando por el camino y los verdaderos se quedan para siempre.
    no te sientas nunca sola, siempre tendrás alguien a tu lado, más cerca o más lejos, física o virtualmente, pero ahí.
    Sigue con esas historias de Theramón, no las dejes nunca. Envidio a la gente que escribe porque yo dejé de hacerlo hace tiempo.
    Besos y el día 31 te daré un tirón de orejas a través de la red

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  3. ya sabes prima que dejando mensajes no soy muy extensa pero te lo voy a decir., no eres frikie, no eres rara, eres especial y única y si alguien no lo quiere ver que le den así de claro te lo digo, que tus alegrías son las mias, si tu lloras yo lloro y si ries reire contigo, siempre estaré contigo y siempre seras mi prima, mi amiga, mi consejera, mi confidente y la dragona que me ha robado el corazón

    no dejes de escribir siempre querré más y más

    tu prima la boba del bote

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  4. Bea como a dicho J.J, nmo somos de salir, una tarde perfecta para nosotros es estar uno al lado del otro y cada uno en su mundo.
    Yo soy rara desde que era niña, desde que empeze a escribir y creo que por eso me hie amiga de la soledad, siempre estaba ahí a mi lado.
    Y no estas sola, tu para mí eres una de las cosas buenas que me han pasado este año, conocer a esa dragona tan especial que escondes y que nos enseñas a traves de tu mundo.
    Sigue escribiendo, ya sabes que las amazonas me encantan!!!!!

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  5. Espero que el próximo relato también sea sobre Dayna, no sé, pero hay algo en ella que me resulta cercano, parece una mujer que se fortalece alimentándose de sí misma, saca las fuerzas de su interior sin depender de nadie. En cierto modo es lo que hacemos nosotras!!

    Ese prólogo me ha llegado al alma, y ya sabes el porqué. He aprendido que ser rara y diferente es bueno, me ha costado muchos años llegar a esa conclusión y aceptarla como algo positivo y a día de hoy, después de desear otros pellejos, no cambiaría el mío por el de nadie en el mundo.
    Este año ha sido importante para todos, para esta pequeña familia que hemos creado, más real que otras muchas; y que está destinada a mantenerse fuerte y firme por mucho tiempo.

    Un beso, hermanica!!!
    Te quiero mucho!!

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  6. ¡Bea, tienes una calidad apabullante! Eres una escritora muy completa, aquí dominas con maestría la descripción geográfica, que a mí se me hace difícil hasta leerla, te admiro.
    Bea, sí que eres rara, pero es que todos los seres humanos somos raros, no hay dos con las mismas huellas dactilares. Lo que ocurre es que los más cobardes se refugian bajo el patrón común aceptado pero eso lo pagan convirtiéndose en muertos en vida. A Areyourfantasy le diré que no diga nunca más que es boba del bote porque es un genio con todas las de la ley y a María Martínez que, si es hermana de Bea, quiere decir que es mi hermana también, un beso, hermanita murciana.

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  7. Mi queridísima Ilohiim (espero que no haya declinaciones en esta lengua, querida mía :P)...
    ¿te llaman friki? ¿te llaman rara? ¿te excluyen por no ser normal? Dime, querida mía, ¿por qué deberías ser normal cuando has nacido para ser especial? ¿Quién dice que lo normal es bueno y lo raro es malo? No sufras por esos pobres "normales" que creen que la gente especial está apestada y no merece nada más que burlas por su parte; no te preocupes porque un día esos "normales" verán como tú, la rara, la friki, te elevas por encima de ellos y te conviertes en una persona admirada y querida. Sólo espera, querida mía.
    Sobre los relatos...¿qué puedo decirte que no hayan dicho ya? Eres una maestra, una escritora con tanto talento que parece mentira que no te hayan descubierto aún. He tenido que leer los dos fragmentos de golpe, porque me parecía injusto dejar a medias a la pobre Dayna y su viaje...ese viaje tan duro que, espero, compartas con nosotros en otra de tus entradas.
    Tu forma de describir los paisajes me deja asombrada, Bea. Eres capaz de realizar una perfecta descripción geográfica sin resultar cargante o aburrida (ya podrían aprender algunos grandes), obligas al lector a trasladarse al lugar en el que se ubica la narración y a enamorarse de él...Y eso lo consigues sin dejar de lado la acción principal...maravilloso, simplemente impresionante, querida.
    Me han encantado los dos relatos no sólo por su forma, sino porque nos permiten conocer mejor el mundo de Dayna y a la propia Dayna.
    Muchas gracias por compartir estos retazos de tu mundo, Bea.
    Un beso gigante, feliz cumpleaños y feliz año nuevo :D

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  8. ¿rara? ¡A mí me pareces fantástica! Cada uno tenemos nuestra manera de ser y debemos seguir la estela de lo que nos hace feliz. Así que sigue viviendo a tu manera y no dejes de escribir estos maravillosos relatos que me hacen pasar unos ratos súper agradables. ¡Lo haces genial! Y estoy con María, Dayna me encanta, tiene algo que me hace continuar leyendo a pesar de que ahora estoy al raso con un frío de mil demonios.
    ¡Feliz cumpleaños! ¡Y te deseo una genial entrada de año!
    ¡BESOS, SONRISAS y ABRAZOS!!!

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  9. Bueno, mi niña, hablas de ser rara, de ser friki, de ser distinta... Me río yo de todo eso, porque esas rarezas son las que te elevan, como ha dicho Enone y muy bien, por encima de la mediocridad, o normalidad, llámala como quieras. Para mí lo normal es igual a mediocre, a soso, sin sal, sin pimienta... y peor aún: sin azúcar (o amargado). No, cariño, no te flageles ni te sientas culpable por ser distinta. Piensa que todos los que te queremos te queremos porque eres MUY, MUY, MUY ESPECIAL. Que no sales, que no ves la tele, que te comunicas virtualmente con nosotros... Que no haces lo que hacen los demás, ¡bravo, viva, aleluya! Y ojalá siga así por los siglos de los siglos. Amén. Hablando de Thèramon, me dices que no eres buena describiendo geografía... pues debo yo de ser malísima porque a mí esas descripciones me han sabido a gloria. Y que sigas hablando de las Mazome me encanta, ya lo sabes, y de Dayna, y de los Elfos oscuros, que no había yo visto antes de ahora. Quiero más, pero no digo más o no nos quedará nada para mañana. Pero voy a pedir un deseo antes de irme a dormir. Sabes cuál es, ¿verdad? Claro que lo sabes, ¿quién lo va a saber mejor que tú? Gracias por compartir este balance de fin de año con nosotros, sé lo importante que es para ti esta fecha, aunque no lo quieras reconocer, aunque no te guste, aunque te haga sentir diferente. Pero en nuestro Universo la palabra DIFERENTE es igual a EXTRAORDINARIO. Y es un adjetivo que te viene como anillo al dedo. Hasta mañana, mi niña 8)

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  10. Mi respuesta a todos los comentarios, en la siguiente entrada, ¡era mucho lo que quería decir!

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Viajeros de tierras lejanas, amigos de siempre, vuestra visita nos alegra y vuestra opinión nos ayuda, recordad que cada vez que dejáis huella de vuestro paso, Thèramon crece.

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